Título original: Het diner
Año de publicación: 2009
Nº de páginas: 288
Editorial: Salamandra
Ilustración de portada: ¿?
Dos parejas se han citado a cenar en un moderno y exclusivo restaurante de Ámsterdam. Mientras saborean el aperitivo y charlan con aparente despreocupación sobre la última película de moda y sus planes para las vacaciones, son conscientes de que, tarde o temprano, deberán abordar el incierto y acuciante asunto que los ha llevado a reunirse: el futuro de Michel y Rick, sus hijos de quince años, que según algunos indicios podrían estar envueltos en un caso de violencia grave. Así pues, tras los postres, cuando la cena llegue a sus últimos compases, la tensión entre los comensales habrá alcanzado su punto culminante y la cadena de secretos y revelaciones confluirán en un final dramático en el que nadie podrá esgrimir su inocencia.
Incómoda e inquietante. Una de esas historias que no dejan indiferente a nadie. Sin duda, una de mis lecturas más interesantes de este año.
La estructura de la novela es paralela al desarrollo de la cena: aperitivos, entrantes, segundo, postres, digestivo y propina. Esta sucesión de platos nos sirve para ir adentrándonos cada vez más en las personalidades, las relaciones y los hechos en los que se basa la historia. La posición del personaje que nos narra la cena a través de su discurso interior, Paul, el padre de uno de los chicos, resulta ser tremendamente más compleja de lo que nos deja ver en un principio. Esto, unido a la imparcialidad de su narración, hace que durante el trascurso de la velada se nos vayan presentando capas y más capas tras las que se revelan mucha tensión y una buena dosis de incomodidad.
El tema de la responsabilidad de los hijos y cómo la gestionan sus padres, en torno al cual gira el conflicto principal, plantea otras cuestiones desde un punto de vista bastante controvertido: las diferencias entre los hijos biológicos y los adoptados, los resultados de la herencia genética en contraposición a la educación recibida o la elección entre la justicia y la reputación.
Solo hay que leer algunas de las reseñas publicadas para darse cuenta de que este es un libro incendiario con no pocos enemigos. En cualquier caso, recomiendo encarecidamente su lectura y un largo debate posterior.
Te gustará si te gustó… no sabría decir. ¿Alguna sugerencia?
Mi versión de la portada: